Poems

La fobia al fuego del señor Brontë

Tal vez la fobia al fuego de Mr Brontë venía de más atrás,
Antes de que la TB, los sudores nocturnos, el esputo con sangre
Se llevara a su esposa, cinco hijas y un hijo, todo su linaje
Hasta que quedó casi ciego, como Rochester, y solo
Dándole vueltas a la mesa del salón: una plegaria perdida.
 
Por ahí Patrick Brontë se viera a sí mismo
Parado al borde de un abismo,
Donde el hombre pierde todo lo que ama
Y llama a eso fuego, destructor inflamable, oxidante,
Sin aire respirable, tos crónica, peleando por tomar aire.
 
Tal vez Mr Brönte no tuviera otra palabra más que fuego
Para ponerle: el hombre ha de temerle a lo que va adelante,
Consumiendo todo lo que ama, hasta que se ilumina y ya es tarde:
No queda ni una cortinita que correr en las habitaciones de piedra
Entre los vivos y los muertos.